Una de las figuras clave en el proceso de compraventa de una vivienda es la del notario. Sin ellos, no se puede completar el proceso de una razonable seguridad, por lo que es vital poder recurrir a uno de confianza y que permita dar todos los pasos necesarios para que la confianza sea la máxima posible en la transacción.
Es importante saber que no es obligatorio recurrir a un notario, ya que siempre se puede recurrir a un contrato privado, pero es de lo más recomendable su figura para que todo esté perfectamente realizado. Con uno en la operación, se tiene siempre una seguridad jurídica adecuada.
Qué es un notario
Hablamos de un profesional que tiene como objetivo el legitimar y dar fe pública de los hechos que se pactan entre diferentes partes. Está al servicio público, y tiene responsabilidad es que no existan fraudes en los diferentes tipo de transacciones que se realizan en la actualidad. Su función debe realizarla de forma imparcial para poder certificar con un documento que todo se ha realizado de forma legal.
Entre los tipos de documentos que suele gestionar la figura de un notario están las escrituras de compraventa de viviendas; testamentos; e, incluso, una gran cantidad de contratos entre particulares. Aparte, el notario es un profesional del derecho que ejerce su actividad utilizando el régimen oficial de competencia.
¿Es necesario un mutuo acuerdo para utilizar un notario?
Pues esto es algo que se debe tener muy claro: si una de las partes desea que exista un notario en la transacción propia de una compraventa, la otra no se podrá negar. Por lo tanto, simplemente con que alguien así lo pida, se tiene que dar uso a esta figura que aporta seguridad y que es independiente. Además, permite establecer una certificación legal.
Recurrir a un notario es obligatorio en otro caso que es bastante habitual: cuando el comprador tiene que recurrir a una hipoteca para poder comprar un piso. El motivo es que el Registro de la Propiedad no admite contratos privados para inscribir una vivienda que tiene un cambio y, los bancos, no conceden dinero en forma de préstamo si la vivienda en cuestión no está inscrita en el registro antes mencionado. Por lo tanto… En la mayoría de las ocasiones es indispensable que esté presente un notario.
Las funciones principales que tiene
Una de las que no se conoce que ejercen los notarios y que es fundamental es que exista una gran transparencia en la transacción que se realiza. Esto significa que debe explicar con detalle el proceso y asegurarse que todas las partes entiendan lo que va a ocurrir. Esto incluye desde el grueso de la documentación hasta todas las cláusulas que se pueden establecer.
Otra de las funciones que tienen los notarios es la de dar fe que las partes involucradas en las operaciones están conformes con el objetivo del contrato. Y esto debe ser así de una forma libre y exenta de presiones. Para conocer esto, una de las cosas que se hacen es proceder a la lectura del contrato para que todos puedan dar el visto bueno y realizar preguntas de apartados que no se entiendan si sí se necesita. Esto ocurre también con testamentos y préstamos con los bancos. Es decir, que la transparencia es de las claves por las que es importante recurrir a un notario.
Casos especiales en las hipotecas
Aquí el notario tiene funciones adicionales, como por ejemplo indicar siempre el valor máximo que se puede poner a una casa de protección oficial -y las condiciones a cumplir para hacer esto-, y que establece el Estado. De esta forma, se previene que se pueda cometer un fraude por cualquier de las partes que están involucradas. Si esto no es así, está obligado a detener el proceso.
En las transacciones de compra de viviendas, también el profesional tiene que asegurarse que una casa de uso familiar se puede vender, y esto incluye el certificar que los cónyuges -si existen- saben lo que está ocurriendo y si están conformes.
Pero, posiblemente, lo más importante en este apartado de todo lo que tiene que hacer un notario, es que es el encargado de redactar el contrato de la compraventa. El motivo es que ellos tienen los conocimientos necesarios para que se cumpla con todos los requisitos legales, algo indispensable para extender una Escritura pública (exigida por los bancos para poder conceder hipotecas): El motivo es la seguridad que aporta en todo el proceso y que, por este motivo, no existirán problemas legales futuros.
Algunos puntos que deben existir siempre en los contratos son los siguientes:
- Que el inmueble está exento de cargas y libre de arrendamientos.
- Certificar la veracidad de la identidad de las personas que intervienen en el contrato (será necesaria aportar la documentación correspondiente).
- Certificación de que el vendedor es el propietario de la vivienda.
- Se exigirá también los Certificados de Eficiencia Energética, que deben estar al día, así como de la Cédula de habitabilidad y los datos que aseguren un correcto medio de pago.
En definitiva, ¿es positivo recurrir a un notario?
Como hemos indicado, la respuesta es muy clara: si deseas realizar una transacción segura y donde no existan problemas en los que se tenga que recurrir a los tribunales en el futuro, entonces debes hacerte, sí o sí, con los servicios de un profesional de este tipo. Su función, como tercera parte imparcial para que todo sea legal y seguro, es básica para no estar preocupado por nada cuando llega la hora de firmar un contrato (que, en el caso de una vivienda, puede ser el más importante de toda una vida).
Además, es importante volver a destacar que importancia que tiene que ver con la garantía jurídica, algo a lo que muchas veces no se le presta la debida importancia y que es vital en los tiempos que corren. Y, como no, todo lo que tiene que ver con la custodia documental que realizan los notarios, así como la información que dan a la firma del contrato, es crucial para que nadie se sienta engañado.