Cuando investigamos sobre las diferentes formas de calcular el valor de una vivienda muchas veces nos encontramos con dificultades para entender la diferencia entre tasación y valoración.
A simple vista ambos conceptos pueden parecer similares ya que su objetivo es el mismo, conocer el valor que tiene nuestra vivienda o la propiedad que queremos comprar. Sin embargo, hay ciertas diferencias sustanciales que tenemos que tener en cuenta para saber cuál de estas formas de calcular el valor de un inmueble es la que necesitamos.
Principalmente la distinción más reseñable está en su validez legal. Por lo que dependiendo la finalidad para la que necesites conocer esta información tendrás que decantarte por una u otra.
En este artículo te contamos cuál es la diferencia entre tasación y valoración y en qué supuestos debes utilizar una u otra.
Qué significa tasar una vivienda
Una tasación es un documento legal elaborado bien por un técnico inmobiliario o bien por un arquitecto. En este caso el profesional ha de visitar la propiedad y realizar su valoración de acuerdo a un baremo oficial y objetivo (ECO/805/2003) que está recogido en el artículo del BOE marzo de 2003.
La tasación tiene que ser realizada siempre por profesionales y/o sociedades inscritas y homologadas para este propósito.
Esta forma de calcular el valor objetivo de una vivienda es necesaria para realizar cualquier trámite jurídico. Es decir, la necesitaremos para repartir una herencia, en procedimientos judiciales, gestiones importantes en bancos como solicitar un crédito hipotecario, etc.
En otro post, también te contamos cuanto de fiable era una tasación.
Qué es valorar una vivienda
La valoración es una estimación orientativa del valor de una propiedad realizada por un profesional, agencia o empresa inmobiliaria.
Su característica más llamativa es que para realizarla en principio no es necesario visitar la vivienda. Las persona, agencia o empresa que realiza la valoración se basa en diferentes datos sobre el inmueble como:
- Datos catastrales de la vivienda.
- Información sobre la localización y entorno en el que se encuentra.
- Experiencias propias del profesional, agencia o empresa con inmuebles similares.
La valoración es un documento que, idealmente, debería de estar realizada o al menos firmada por una agente de la propiedad inmobiliaria (API). Es importante tener en cuenta que no tiene valor legal ya que para elaborarla no se utiliza un procedimiento normado.
De hecho, existen webs que ofrecen valoraciones online en las que simplemente rellenando un formulario podemos recibir una estimación aproximada de su valor.
Generalmente, el objetivo de la valoración es iniciar un proceso de compra-venta de una propiedad inmobiliaria. Por ejemplo, cuando nos planeamos vender una casa y queremos saber aproximadamente cuánto podemos conseguir o buscamos comprar y nos gustaría saber si el precio que nos han ofrecido es justo.
Conclusiones
La principal diferencia entre tasación y valoración de una vivienda es su valor legal. Mientras que la tasación sí que tiene valor legal y puede utilizarse en procedimientos oficiales y judiciales, la valoración no tiene esta característica.
Del mismo modo, mientras que la tasación se basa en un baremo objetivo y oficial la valoración no sigue un proceso reglado. Lo que, y es importante recalcar este punto, hace que se nos puedan dar diferentes valoraciones de un mismo inmueble en función de a quién consultemos.
Respecto a las formas de calcular el valor de una vivienda también es importante mencionar el peritaje.
Este tercer estudio inmobiliario para calcular el valor de un inmueble es el único que se basa únicamente en aspectos puramente objetivos. Se trata de un procedimiento que tiene que ser realizado por un perito en el que se recogen las razones objetivos por las que se le asigna a un inmueble un valor determinado. Este tiene en cuenta los materiales de la construcción u como se han utilizado, además de otros aspectos como el desgaste en viviendas de segunda mano por ejemplo.
Se trata de un documento que podemos utilizar para apoyar la tasación o valoración de un inmueble y que también nos sirve para conocer el por qué se ha fijado su valor en cierta cifra y no en una inferior o superior.
A modo de resumen de todo lo que hemos explicado anteriormente sobre los diferentes modos de conocer el valor de un inmueble podríamos destacar las siguientes notas:
- La tasación tiene valor legal mientras que la valoración no.
- En cualquier proceso jurídico la valoración no será suficiente, necesitaremos una tasación.
- Aunque ambas opciones se basan principalmente en criterios objetivos, la tasación sigue un procedimiento reglado y la valoración no.
- Para realizar una tasación es necesario visitar la vivienda mientras que para hacer una valoración no.
- Si además de conocer el valor del inmueble queremos profundizar en las razones detrás de la cifra estimada la mejor opción es hacer un peritaje.
En el caso de que queramos conocer el valor de una vivienda a nivel personal nos bastará con una valoración mientras que si necesitamos conocer esta información de forma oficial tendremos que tasarla.